Cancha la Media Torta, Villa María.

PASADO MEDIA TORTA.

En el municipio de Villa María, a ocho minutos de la ciudad de Manizales, por iniciativa de un alcalde que ejerció su puesto a inicios del año 2000, se inauguró una cancha de fútbol, para dos equipos, cada uno de cinco integrantes cada; en este espacio, además de su meseta principal, se acondicionó con un parque infantil, 12 graderías y en un lado de la cancha, una superficie con columnas, apta para entarimar eventos. 

Desde su inicio, el lugar ha sido escenario de constantes visitas en horarios diurnos y nocturnos, en el día lo concurrían niños entre los 9 y los 13 años, con ánimos de divertirse. Las graderías, principalmente en la noche, albergaban un grupo de personas dedicadas al expendio y consumo de drogas, en especial la marihuana. “El chiti”, fue el primer hombre en utilizar una columna del estrado para calcar su seudónimo “Hernán, no recuerdo el apellido, era el que movía esto acá”, recuerda Juan David Usma,  hombre de 23 años, que desde su primer década de vida, visita constantemente el lugar. Comenta que siempre se ha presentado rivalidad entre los que lideran la cancha La Media Torta, y el otro grupo de jíbaros que tienen su choza a cuatro cuadras del polideportivo “las firmas, son los que siempre han manejado la ‘ficha’ acá en la Media, los ‘primos’ la mueven pero saben que por acá ya no suben”, relata Usma.

Desde que La Media se posicionó en el micro tráfico, abundaban las riñas entre combos y líderes, su paso, además de muertos, ha dejado de graves lesiones a integrantes de ambas bandas. “Aquí era muy común los campeonatos micro, a partir de las 10 de la mañana nos reuníamos el combito y jugábamos hasta que nos cansábamos”, comenta el antiguo visitante. Además, insiste que “la infancia se nos atrofió”, ya que recuerda que siempre se divertían mientras rebosaba el olor a marihuana, y sonríe con resignación “mis primeros plones fueron a los 12”. Aquí se escuchaba el constante pronunciamiento de palabras soeces, los incitantes cantos de Cosculluela y Yomo y el sonido del carraspeo que producía el deslizar el cuchillo sobre la lima.

Desde su inauguración y hasta ahora, se estima que al menos las delimitaciones de la cancha, la fachada y columnas de la plataforma, además de la gradería, se han pintado de 3 a 4 ocasiones. La más reciente, fue el pasado 7 de julio, en las horas de la mañana. La albañilería les correspondió a seis personas, estas concurren la meseta hace aproximadamente dos años, en ella desarrollan la disciplina del Stunt, actividad que consiste en realizar trucos sobre una motocicleta. Los integrantes de este club, formalizaron un acuerdo verbal con el comandante que en este momento tiene la jurisdicción del edificio, el trato consistía en que se permite realizar acrobacias y prácticas de alto riesgo, con la condición de remodelar estéticamente la Media Torta de Villa María.

FRANCISCO AUGUSTO CARDONA CUESTA. 

Efecto Dadá

copas incrementa subida caleta

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CUESTA AUGUSTO FRANCISCO CARDONA.

PANÓPTICO DEL LUGAR.

Los mecanismos de control del municipio, se derivan a la malaventurada llegada de las autoridades, sus visitas en las patrullas que de inmediato conlleva a palidezas duraderas. A leguas no se encuentran cámaras de seguridad, el llamado que invita a los patrulleros al lugar, lo produce el tecleo de un teléfono, el mismo que puede ser interceptado si de cumplir caprichos se trata. 

HAIKU

Respirar aire,

Siempre por encima,

Vida quemada.  

Lengua en papel,

Encendido manual,

Día, aquí normal. 

Giro tras giro, 

Cabeza cubierta,

mentes envueltas. 

COLLAGE

FOTOS DEL LUGAR.

FRANCISCO AUGUSTO CARDONA CUESTA. 

El parecido entre la cancha y la sala de mi casa.

Párrafo descripción de la sala.

La sala de mi casa alberga tres ventanas y tres puertas. Dentro de ella, está el espacio indicado para parquear mi motocicleta, en la pared que separa dos puertas, se recuesta una estructura de madera con tres vidrios que lo atraviesan de esquina a esquina, en esta superficie transparente reposan fotografías, notas de recuerdos, el equipo de sonido y recuerdos antiguos de la pasión de mi padre por el Once Caldas. En el resto del espacio, se ubica un conjunto de tres muebles cómodos, aptos para la socialización, para compartir cigarros y copas.

Similitud entre los dos lugares.

La sala de mi hogar, tiene similitud con la Media Torta en Villamaría, por qué al igual que en la cancha, hay lugar para dejar los vehículos mientras se detiene el camino para darle función a la candela y para destapar botellas. En mi hogar no se pueden guardar, ni palpar las boletas viejas con el escudo del Once Caldas grabado, debido a la afición innegable de mi padre, los que habitan la media torta, tienen afinidades con este mismo equipo, por lo tanto no permiten que distintos hinchas marquen su territorio.

Unión de los dos párrafos.

La sala de mi casa transporta vivencias que se viven dentro de la Media Torta. La llama de la candela y el contenido de la botella, ambientan los lugares. Los pies se menean y el sonido de las voces y música technera armonizan la charla. Los diálogos de motos y equipos de fútbol son el tema que encamina el parloteo.